¿Qué es ser autónomo y qué es una sociedad limitada?
Antes de decidir por una modalidad o por otra, debe antes saber que es un autónomo y qué es una sociedad y lo que implica. En los párrafos que siguen le explicamos que implica cada figura y por cuál debiera decantarse en la actualidad.
Acertar con la decisión de convertirse en autónomo o constituir una sociedad limitada
Al acometer una empresa en soledad, tiene dos posibilidades básicas, hacerlo como autónomo persona física o constituyendo una sociedad limitada.
No depende del tipo de actividad ni del modelo de negocio elegido, la única variable a contemplar es cuánto beneficio va a tener cada año, a partir de 40.000 euros anuales ya interesa crear una Sl, puesto que una persona física tributa de modo progresivo en su Irpf mientras que una sociedad lo hace al 15% durante el primer año y el siguiente que dé beneficio, posteriormente lo hará al tipo normal del 25% para una pyme.
Ventajas
La única ventaja que tiene el autónomo persona física es la mayor simplicidad documental pero por otra parte responde con todo su patrimonio presente y futuro frente a terceros, asumiendo garantía de pago total frente a las deudas mercantiles que puedan darse, no hay seguridad plena de éxito en ningún negocio.
Hoy en día se crean sociedad limitadas en 48-72 horas, incluso más rápido que darse de alta como autónomo persona física en Hacienda y la Seguridad (requieren cita previa que en ocasiones se demora 15 días).
La mayor complejidad en la documentación y contabilidad de una sociedad se compensa de sobra por las ventajas fiscales que redundan en muchas ocasiones en sustanciales cantidades.
Capital Social Mínimo
El capital social mínimo de 3000 euros tampoco es un problema puesto que éste se puede aportar mediante bienes (mobiliario, ordenadores…).
¿Modificar el Régimen Económico de Gananciales?
De optar por la figura de autónomo quizá sería aconsejable que antes modificara el régimen matrimonial desde gananciales a separación de bienes, de este modo la familia puede estar en cierta medida protegida de hacer frente con todo su patrimonio ante deudas comerciales.
Facturación
En cuanto a la facturación, hay que reseñar que la fecha a tener en cuenta es la de alta en IAE, ya que ello implica que tendrás presentar impuestos periódicamente (tales como el Iva, Retenciones Irpf…).
En la práctica aunque el autónomo no está obligado a llevar una contabilidad profesional, sí que le servirá de inestimable ayuda, si le llama o inspecciona Hacienda, puesto que está le va a pedir, listados de facturas emitidas y recibidas, acompañados de la documentación soporte (las propias facturas físicas y documentos de pago).
Conclusión
En conclusión, si va a facturar una cifra media o alta con potencial de buenos beneficios, sin duda, es muy conveniente que se cree una sociedad limitada, máxime si va a dar beneficios, y en principio, nadie crea una empresa para no darlos.